Sacha Baron Cohen vuelve a la carga con El dictador, una ácida e irreverente sátira política que calienta motores en su gira mundial de presentación, que ahora ha llegado a Cannes. Muy cerca de donde se celebra el Festival de Cannes, Baron Cohen se ha puesto en la piel del protagonista de El dictador y ha hecho de las suyas.
Si alguien sabe promocionar sus películas a lo grande y causando verdadero revuelo y tirón mediático, ese es Sacha Baron Cohen, que ahora ha llegado al Festival de Cine de Cannes dispuesto a dar la nota metido de lleno en el personaje protagonista de El dictador, el general norteafricano Aladeen.
Este dictador genocida, torturador, machista y hasta incluso pedófilo, atracó ayer uno de sus yates en Cannes acompañado de la exnovia de George Clooney, Elisabetta Canalis. Unos arrumacos por aquí, unas caricias por allá, un bailecito en cubierta y una inspección de entrepierna con decepcionante sorpresa para la fémina. Bofetón por aquí y orden del dictador a sus soldados. ¿Final? Un cadáver envuelto en plásticos en el fondo de la costa de Cannes.

Tras este incidente, el general Aladeen a lomos de un gran camello y escoltado por sus dos guardaespaldas femeninas fuertemente armadas, hace su entrada triunfal en la alfombra roja del Festival de Cannes. Sin duda, con estos numeritos, entra por la puerta grande.
El dictador se estrena el próximo mes de julio en España, y promete. Uno de sus protagonistas, el oscarizado Ben Kingsley, ha afirmado sin dudar que esta cinta escrita por el propio Sacha Baron Cohen junto a Alec Berg, David Mandel y Jeff Schaffer, es una sátira política perfecta. Habrá que verla; indiferentes seguro que no nos deja.