La noche de Halloween llega a las salas de cine españolas una película de título espeluznante, Caminando entre las tumbas, que, sin embargo, poco tiene que ver con el género de terror. Liam Neeson, protagoniza este thriller en el que interpreta a un investigador privado sin licencia y con problemas con la bebida. Su vida cambiará de rumbo cuando Kenan Khoury le contrate para vengar la muerte de su mujer.
Su principal atractivo, sin duda, es la personalidad de Matt Scuder (Liam Neeson) y lo oscuro de los casos a los que se enfrenta como investigador privado. En la escena podemos ver al protagonista, Scuder, hablando con uno de sus clientes que sufre de chantaje por unos secuestradores que han raptado a su mujer.

Matt Scudder, antiguo detective del Departamento de Policía de Nueva York, es un alcohólico en fase de recuperación perseguido por los remordimientos y con muchas cuestiones pendientes. Cuando una serie de secuestros que tienen como objetivo a los principales narcotraficantes de la ciudad desembocan en espeluznantes asesinatos, el líder de los narcotraficantes (Dan Stevens) convence a Scudder para que encuentre a los culpables de la muerte de su mujer.
Trabajando como detective privado sin licencia, Matt ve lo que la policía no puede ver, y transita por los lugares que más temen. Operando al margen de la ley para localizar a los responsables de tales atrocidades, Scudder camina entre las sombras por un filo que puede convertirle a él mismo en un monstruo.
Caminando entre las tumbas está basada en una de las 17 novelas sobre Matt Scudder escritas por el aclamado autor de novela criminal, Lawrence Block. La saga de Scudder lleva editándose desde hace más de cuatro décadas y se ha traducido a más de 20 idiomas. La película está bajo la dirección de Scott Frank, que ha cosechado muy buenas críticas que la describen como "un drama criminal sólido" y "visualmente muy original".